Es la palabra que acabo de inventar pensando en el caos existencial que te genera la combinación letal de los hombres y las hormonas. Estás de acuerdo que evidentemente no se entienden y nunca se van a entender? Porque un hombre (a menos que haya vivido pegado siempre a la madre) es muy complicado que entienda lo que es el sube y baja emocional del ciclo hormonal; es más fácil que aprenda a bajar la tapa del inodoro cada vez que va al baño (antes se convierte en astronauta en 6 meses).
El punto exacto debe ser aprender a vivir con ambos, pero entonces se acabarían las peleas, los malos entendidos, los gritos, el "no estarás embarazada?", los portazos, las colgadas de teléfono, la mala contestación, el comentario fuera de lugar, el llanto incontrolable, el sollozo perpetuo...
Mira... La verdad... Sería DEMASIADO aburrido, por algo somos mu-jer-ci-tas, para ponerle sazón a la vida y con este par de condimentos (tú y yo), se debe poner sabrosa (dichosos aquellos), solo es cuestión de dejar pasar un par de días y todo vuelve a la normalidad.
Te quiero.
El punto exacto debe ser aprender a vivir con ambos, pero entonces se acabarían las peleas, los malos entendidos, los gritos, el "no estarás embarazada?", los portazos, las colgadas de teléfono, la mala contestación, el comentario fuera de lugar, el llanto incontrolable, el sollozo perpetuo...
Mira... La verdad... Sería DEMASIADO aburrido, por algo somos mu-jer-ci-tas, para ponerle sazón a la vida y con este par de condimentos (tú y yo), se debe poner sabrosa (dichosos aquellos), solo es cuestión de dejar pasar un par de días y todo vuelve a la normalidad.
Te quiero.
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